Bruselas promete responder si Trump impone aranceles a las bebidas alcohólicas de la UE
La Comisión Europea lamentó este viernes la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles a los vinos y otras bebidas alcohólicas europeas, y aseguró que responderá a los mismos si no encuentran antes una solución negociada.
El comisario de Comercio, Maroš Šefčovič, tenía previsto mantener la tarde de este viernes una conversación telefónica con el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, y con el Representante de Comercio de ese país, Jamieson Greer, para intentar frenar la guerra comercial.
«Lamentamos incluso el tono de este tipo de declaraciones. No creemos que ayuden a nadie y hemos dejado claro que queremos que Estados Unidos revoque inmediatamente los aranceles ya impuestos y que desista de imponer otros porque no les benefician y no nos benefician», dijo el portavoz de comercio del Ejecutivo comunitario, Olof Gill, en una rueda de prensa.
Preguntado por el anuncio de Donald Trump de posibles aranceles de hasta el 200% a los vinos y otras bebidas alcohólicas europeas, el portavoz insistió en que la Comisión Europea está abierta a negociar con Estados Unidos para que no lleguen a aplicarse, pero aseguró que, de no lograrlo, Bruselas responderá para proteger a los sectores concernidos.
Subrayó que la Comisión dará «todos los pasos posibles para proteger y apoyar» a los sectores económicos que lleguen a verse afectados por medidas comerciales «injustas», y que cuenta con herramientas a su disposición para ello «si fueran necesarias», aunque rehusó especular sobre qué acciones concretas podrían adoptar.
«Seguimos totalmente comprometidos con encontrar soluciones con nuestros socios estadounidenses que beneficien a ambos lados, pero si Estados Unidos insiste en mantener este rumbo perjudicial, contraproducente y profundamente injusto, responderemos para proteger a los consumidores, la industria y la igualdad de condiciones», dijo el portavoz.
La respuesta «fuerte» de la UE
En este sentido, destacó que el Ejecutivo comunitario ya ha anunciado una respuesta «fuerte» ante los aranceles que Estados Unidos prevé imponer el 2 de abril al acero y aluminio europeos y ha dejado claro que actuará «de modo rápido y sólido» cuando sea objeto de prácticas comerciales injustas.
Pero al mismo tiempo también ha dejado «espacio a la negociación» y, en este contexto, la repuesta ya anunciada –aranceles recíprocos a productos estadounidenses por un valor de hasta 26.000 millones de euros– permite que la UE llegue con «una mano más fuerte» a las negociaciones.
En este sentido, la conversación entre representantes de Comercio de uno y otro lado del Atlántico es «un paso positivo (que demuestra) que este diálogo está ocurriendo», dijo el portavoz, quien añadió que Bruselas busca encontrar «compresión» por parte de sus socios para intentar cerrar acuerdos en lugar «implicarse en represalias perjudiciales».
Impacto especial en Italia
Si finalmente se imponen, los aranceles estadounidenses amenazan con tener «efectos significativos» en Italia, cuyas exportaciones son superiores a las de Alemania, Francia y España.
«En 2024, más del 48 % del valor de las exportaciones italianas salió fuera de la UE, una cuota superior a las de Alemania, Francia y España», reveló este viernes el Instituto Nacional de Estadística italiano (Istat) en un informe.
Según resaltó, Estados Unidos está «entre los principales socios comerciales» de Italia, ya que «absorbieron cerca del 10 % de las ventas al exterior» y «más de una quinta parte de las de productos italianos destinados a mercados fuera de Europa».
Italia, con un potente sector comercial e industrial diversificado y en gran medida situado en el norte del país, está considerado como uno de los principales países exportadores a nivel mundial.
La primera ministra italiana, la ultraderechista Giorgia Meloni, considerada una de las principales aliadas de Trump en Europa, ha apelado a dialogar con Estados Unidos para alcanzar un acuerdo que evite la imposición de aranceles.
Entre los sectores afectados por el plan de Trump en Italia figura la industria automovilística, que cuenta con empresas como la franco-italiana Stellantis -antes Fiat-, que en los últimos tiempos vio como sus acciones en la Bolsa de Milán se desplomaban ante el clima de desconfianza global creado por la cuestión arancelaria.
Fuente: Euro EFE